Fracturas de huesos en perros y gatos

Fracturas de huesos en perros y gatos

Existen varias causas que pueden originar fracturas en los perros y gatos, pero normalmente están asociadas a traumatismos importantes causados por caídas, atropellos, saltos, etc.

La gravedad de la fractura dependerá de la fuerza del impacto, de la ubicación de la lesión, de la edad y del estado de salud del animal afectado.

Las fracturas suelen clasificarse como abiertas o cerradas. Una fractura abierta se produce caso la parte rota del hueso sea visible a través de una abertura, es decir, el hueso está  expuesto, mientras que una fractura cerrada ocurre en situaciones en las que la piel sobre el área afectada permanece intacta.

Los signos más frecuentes en mascotas que han sufrido una rotura ósea incluyen: lloro si se toca el área afectada; cojera; incapacidad de caminar; hinchazón en la zona fracturada; falta de apetito y de aseo; lamerse la parte dolida. Si se trata de una fractura de la espalda, la mascota podrá sufrir una parálisis.  

Si tu perro o gato ha sufrido un accidente o si observas cualquiera de estos síntomas, ¡tu mascota requiere asistencia veterinaria inmediata! Si sospechas que ha roto algo, intenta mantenerlo lo más quieto posible y transpórtalo a la clínica en una superficie dura (una tabla, por ejemplo).