¿Cómo bañar a tu perro o gato?

¿Cómo bañar a tu perro o gato?

Es recomendable que a tu mascota le des un baño para eliminar la suciedad, restos pegajosos o cualquier otro residuo en la piel. 

Si tienes dudas de cómo hacerlo porque cada vez que lo bañas te araña y no se queda quieto te vamos a dar unos tips.

Pasos para bañar a tu gato: 

  1. Si tu gatete es pequeño empieza a acostumbrarlo al agua para que no sea algo extraño para el. Prepárate un recipiente y déjale que se acerque para que se familiarice con la situación.
  2. Haz que el baño sea lo más cómodo posible y rápido, así evitarás exceso de tensión .
  3. Si lo vas a bañar en una bañera usa una alfombrilla antideslizante para que no se resbale. Pero si lo vas a bañar en un envase de plástico grande que este sea espacioso y te permita que esté cómodo y puedas realizar esta tarea.
  4. Antes de bañarle tienes que cepillar su pelo para eliminar nudos y para calmar a tu animalito. Estate tranquilo y no estés nervios@ porque así puedes transmitir calma a tu compañero.
  5. Prepara todos los utensilios y champús especiales a mano, así no tienes que parar para buscarlos cuando los necesites. Nunca uses productos para humanos o perros. Prepara el agua a una temperatura tibia y usa una esponja que le resulte agradable.
  6. Ponle algodón dentro de sus orejas para impedir que el agua entre en sus oídos porque si se introduce en ellos puede causar inflamaciones y complicaciones posteriores.
  7. No lances a tu gato a la bañera o envase directamente, ves poco a poco introduciendole en el agua. Tómalo por la nuca con una mano y con la otra mano coge su cuerpo. Déjale que se vaya habituando.Comienza mojando su cuerpo. La cabeza es lo último que debes humedecer y lavar. Aplica el champú y frota suavemente masajeando para que la suciedad salga de su pelo. Si se revoluciona demasiado puedes ayudarte con una toalla para cogerlo.
  8. Deja actuar el champú el tiempo que indica el envase para hacerle sentir seguro. Aprovecha este momento para mojar poco a poco la cabeza de tu gatete, luego retira el champú vertiendo el agua desde el lomo hacia atrás, para asegurarte de que queda libre de residuos que más adelante podrían causarle alergias.
  9. Seca su pelo con una toalla pero no frotes sobre el pelo del animal porque el movimiento brusco lo altera. Presiona delicadamente con suavidad. 
  10. El secador en muchos casos está contraindicado con la mayoría de tratamientos, ya que podemos erosionar la piel, por lo que es más recomendable acomodar a tu gato en una habitación bien aclimatada para que espere tranquilamente mientras se seca. Además, puedes aprovechar ese momento para darle chuches o comida húmeda y hacer más agradable la experiencia. 

Pasos para bañar a tu perro

  1. Empieza cepillando a tu perrete para quitar cualquier pelo suelto y los residuos de la capa. Esto se hace porque los nudos y enredos son más difíciles de quitar cuando está mojado.
  2. Prepara el baño asegurándote de que el agua sea la misma temperatura que la del cuerpo de tu animalito. No debe ser ni caliente ni fría.Tiene que ser la misma que la que utilizas para bañar a un niño. Usa algo fácil para que pueda entrar o salir como, por ejemplo, una bañera o un recipiente grande.
  3. Moja la capa del animal desde el cuello hacia abajo. Usa la ducha de mano porque te será más cómoda. También puedes usar un jarro o un cubo para mojarlo. Ten cuidado de que el agua no entre en el oído. También, ten cuidado con sus ojos y la zona de la boca. Cuando esté bien limpio puedes limpiar su cara y la cabeza con un paño húmedo.
  4. Una vez que la capa está bien mojada, distribuye suavemente el champú para perros, empezando por el cuello y luego hacia abajo.No utilices champú para humanos, ya que estos pueden secar la piel de tu perrete y causar irritación. También puedes utilizar acondicionador especial para el pelo, el cual, mantendrá su pelo extra suave y brillante.
  5. Intentará secarse sacudiéndose, pero tú debes secarlo bien con una toalla grande al terminar su baño.
  6. Usa un secador de pelo para secar la piel siempre y cuando tu animalito lo tolera o no esté contraindicado para su tratamiento, ya que sino podría asustarle al no estar acostumbrado o herir su piel. Si lo utilizas, a temperatura suave siempre. Si no puedes usarlo aclimata una habitación para que se seque de forma natural sin resfriarse y aprovecha el rato para chuches, juegos y comida húmeda. 

¡Así seguro querrá volver a bañarse!

Si necesitas más consejos o tienes dudas consulta en nuestra clínica y te ayudaremos.